miércoles, 30 de junio de 2021

Mi Generación

Les prometieron progreso pero se encontraron con conductas 
aún un tanto retrógradas.

Volvieron a los obsesos
Atornillados los músculos al rostro 
Exigiendo cada vez más 
Hasta poder seguir 
Reventar con tropas

Un juguete común de discursos 
Ese hombre soy yo
Un tatareante que nació 
Y ahora vivo en el presente
Con un pie en la casa
Y otro en el aire

Con un sueño sin espacio 
Y un futuro de vidrios
Mis amantes escuchan de poetas 
De negocios y trabalenguas

Recibirle a la vida el precipio
Tan hondo 
Para luego vivir
Y quedar en el vaiven

Soy equilibrio 
No reniego de lo que elijo
A veces me pongo a llorar 
Exigiendo cada vez mas 

A los 30 días de junio
Del año veintiuno
Del segundo milenio 
Soy un hombre, ese menos común 
Y más igual a todos los de mi generación 
Ese hombre soy yo


domingo, 30 de mayo de 2021

Vuelta

Yo he vuelto a escribir
No es el recuerdo de ella
Es la nueva flor. 
Cuyo elixir por las noches
saliva mi garganta
Y eso no pasaba hace mucho tiempo. 
Tienes algo, 
Eres mi musa
Y haces que me quiera quedar de mañanita

lunes, 11 de junio de 2018

Mujer de huidas

Llegué, un poco sorprendido si.
Aunque lo sospeche por tu actitud al salir del cuarto.
Hay un poco de temor en tus palabras, abrirte un poco sentimentalmente,
eso lo comprendo.

Si  pronto, a partir de eso,
me olvidas no me busques, que ya te habré olvidado.
Y piensa
que hoy, en este día,
a esta hora levantaré los brazos y saldrán mis raíces a buscar otra tierra.

Pero si cada día,  cada hora sientes que a mí estás destinada  con dulzura implacable comprenderás la verdadera afirmación de la mujer que vuela y serás aquella mujer etérea, que por arrepentimiento hoy te evades.

Has abierto de nuevo mi búsqueda de una mujer etérea, una mujer que brinde mayores atractivos y placeres que una mujer terrestre. 

Es posible encontrarla, es posible hallarla, seguiré en mi búsqueda
porque no concibo
que se pueda hacer el amor más que volando,
entre los pechos como dos querubes, el rostro más feliz de su propia vida,
la mente más fuerte e independiente y las piernas prietas como columnas

lunes, 4 de agosto de 2014

Anida esperanza

Cuando la luz sea tenue al final del túnel
Anida esperanza
Conserva el paso y desvía los percances

Cuando un tumulto te obstruya
Anida esperanza
Luego de la tormenta vendrá la calma

Cuando un grito te ensordezca
Anida esperanza
Que el silencio interior sea tu néctar

viernes, 18 de abril de 2014

Acertijo excitante


Veo en su cara

el próximo gesto: rabia
Es una molestia
ante el medio
y le da tedio
Y yo soy el causante
algunas veces
la mayor parte ella misma
deambula inquieta

En su rostro
los contornos forman
el próximo gesto: placer.
Ha ocurrido al amanecer.
Es un simple roce
que  complace.
Es una suma cero
ni gana ella
ni pierdo yo

Y si vuelvo a su cara
que vaina,
otra vez veo
su próximo gesto: una sonrisa
Aunque siempre más tarde
que la expresión generada.

Usted cree que adivino
Lo que piensa
y le da miedo 
que no hubo tiempo
para esta intensidad.

Sentir es la consecuencia
De un tumulto salvaje
Que noquea
Al cerebro y su andamiaje.
Es un estado de espera
Y acciona de corto tormento
Para lucir una bella












sábado, 8 de marzo de 2014

Me gustan

Me gustan las mujeres que ríen, que lloran
las que son como montañas rusas
Las que me sorprenden
Las que se excusan.

Me gustan las que luchan por sus derechos
Aquellas que gozan de un buen libro
o las que se les complace en su lecho

o con una buena conversación


Aquellas que comprometen de más
y reciben mucho menos.

Aquellas que bailan 
como si nadie las viera.


Pero sobre todo me gustan las que dan vida,
porque una de ellas me dio la mía
sin la cual no pensaría
estas palabras.

Larga vida a las mujeres que conozco y las que aún estoy por conocer para que en venideros 8 de marzo los celebren con sus esposos, sus hijos y hasta nietos. Feliz día.

viernes, 7 de marzo de 2014

La firma del fin


2:00 pm-4:50 pm

Carlos conservó cierto afecto por Patricia, pero no estaba entre sus decisiones seguir con ella hacia algo más rutinario; ellos vivían sus placenteros recuerdos cuando se habían satisfecho mutuamente.

Ahora que se encontraban a charlar como amigos, pudieron disfrutar de su compañía con alguna dificultad. Carlos olvidó su encuentro con Patricia y quiso enrumbarse hacia la oficina, debía estar en media hora para tener los preparativos del contrato y orientar la decoración y los bocadillos que se repartirían en el lugar.

Caminó unas cuatro cuadras al norte del restaurante y entró a un mall para comprar una caja de mentas para su aliento. Coqueteo un poco con la cajera, le dejó su número de teléfono y salió hacia el paradero de taxis.

La oficina se encontraba sola en ese momento, la decoración estaba puesta y los bocadillos listos para la celebración luego de la firma del contrato. Carlos llevó el contrato a la sala de juntas y preparó la presentación en su tablet.

El Ministro tardó bastante en llegar y el presidente Constrec  comenzaba a impacientarse con la demora. Luego de una media hora la reunión comenzó; Carlos hablo acerca operaciones que se realizarían, los deberes y cargos respectivos que asumiría la firma, la periodicidad de los desembolsos de anticipos,los cronogramas de revisión del estado de cumplimiento del contrato y las cláusulas de resolución de conflictos contractuales.Estaba en un buen momento, dar por hecho la firma de un acuerdo contractual con el estado, era lo mejor que le podía pasar a una empresa privada y si a ello se sumaba que pasarían a ser el departamento legal de la misma, no existían motivos para sentirse amilanado.


Terminada su presentación los asesores jurídicos del Ministro no presentaron objeción alguna, el Ministro tampoco se opuso a nada, se escuchó un murmullo acerca de como esta importante obra elevaría al Ministro como un potencial candidato presidencial y buen sucesor del actual. Esa idea la había escuchado Carlos de algún analista político de la revista 7 Días Política.

El Contrato finalmente fue firmado por ambas partes y se estipuló que comenzaría a ejecutarse un mes después. Carlos miró al Ministro, a los abogados del departamento jurídico del Ministerio que lo rodeaban;  al presidente de Constrec, y recordó la imagen del penthouse pobremente decorado, cuyo vacío denotaba la angustia existente en él por saber como lo cobrarían sus nuevos clientes aquellos regalos.